martes, 11 de junio de 2013



SAN BLAS

El archipiélago de San Blas está formado por más de 365 islas en el Mar Caribe panameño. Es también la región de la etnia Kuna Yala, (las personas más pequeñas del mundo después de los pigmeos) que se reparten entre éstas maravillosas islas en más de 40 comunidades

 Salimos del aeropuerto internacional Marcos A. Gelabert, la  avioneta donde íbamos los pasajeros y otra donde viaja el equipaje (mucho peso para tan poco aparato) y el aterrizaje fue en la isla de Playón Chico en una pista de unos 200m cuadrados

Nos trasladaron en cayuco con nuestros guías kunas a  Yandup (isla jabalí) la en la que pasamos un día y una noche.  Tendrá más o menos  100m x 50 m. Hay 9 cabañas para los visitantes y la cabaña restaurante.

Ya en el cayuco, el mar en calma y el sonido del silencio  nos trasmite la relajación de éste lugar aunque esporádicamente es interrumpido por el lejano retumbo de los truenos que informan de la  tormenta y por el canto ocasional de las aves del lugar.

Efectivamente llegó la tormenta tropical que nos impidió navegar en el cayuco hasta alguna isla aún más paradisiaca que ésta en la que nos bañaríamos y tomaríamos el sol.

Marta está decepcionada, ella quería un día perfecto de sol y playa. Pasamos la tormenta mirando como las hojas de las palmeras eran ladeadas al paso del viento y la lluvia cálida, y como los rayos se dibujan desde el cielo hasta el mar.

Desde la Revolución Tule en 1925, los kuna gobiernan toda ésta región manteniendo su cultura intacta desde siglos.

Por la tarde el tiempo nos permitió visitar la comarca del pueblo Kuna. Éste es un pueblo fiel a las tradiciones, a su lengua y a los ritos de sus ancestros.  También muy celosos de su intimidad.

La impresión al llegar a la comarca es que habíamos viajado en el tiempo si no es porque vimos a los hombres con ropa actual o a un grupo de jóvenes jugando al baloncesto en una pequeña plaza. 

No podemos hacer fotos a las personas sobre todo a los mayores aunque si a las calles y las casas.  Niños y niñas corren por las calles jugando descalzos y durante toda la visita  nos anduvieron saludando continuamente y preguntando nuestros nombres. 

Visitamos el congreso local en el que diariamente todas las tardes se debaten y solucionan los problemas de la población y saludamos al sáhila, o primera autoridad.

Nuestro guía nos habló de la organización económica, política, la familia, la mujer, la religión, la gastronomía…

La mujer Kuna es venerada y cuidada ya que es la que genera la vida. Usa una blusa con su mola bajo el pecho, una falda que envuelve su cadera, se cubre la cabeza con un manto y sus piernas están cubiertas y decoradas con pulseras desde el tobillo llegando incluso hasta la rodilla.

Fue la diosa Kabayaí, la que  enseñó a las mujeres de la comunidad la forma de tejer los tejidos inspirados en seres y flora de la naturaleza. La mola. Ésta prenda  es una seña de identidad.

 A la vuelta, ya en isla Yandup pudimos bañarnos en el agua limpia del Caribe que es… “meona” que así si nos entendemos. La arena es blanca y fina.

A las 7 (más o menos) ya es de noche pero noche negra y se oyen las olas del mar a la puerta de nuestro chabolo. El la hora en la que los cangrejos ermitaños toman tierra.

Este lugar solo tiene una definición: Un paraíso

 

Continuará…










 

2 comentarios:

  1. Me he sentido trasportada con los kuna en la isla...
    Que bien que cuentas, moza , me trasmites...
    Lo proximo un libro.....
    Abrazos.




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  2. Esto no tiene nombre...!

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